El dinero no cae del cielo, pero sí puede llegar a nuestras cuentas sin que trabajemos por él si aprovechamos correctamente nuestros ingresos pasivos.
Antes de pensar en cómo aumentar nuestros ingresos, tenemos que entender qué diferencia hay entre los ingresos pasivos y los ingresos activos. Un ingreso activo es dinero que llega a nuestras manos como paga por una labor en la que hemos invertido nuestro tiempo. En otras palabras, un ingreso normal de trabajo.
En cambio, un ingreso pasivo es estructurado durante cierta cantidad de tiempo para entregarnos dinero sin que nosotros tengamos que dedicar tiempo alguno a ninguna labor o tarea. Incluso sin tener que trabajar por él, el ingreso llegará.
Pero no te confundas. No estamos diciendo que debas sentarte a esperar que el dinero llegue mágicamente a tus manos. Generar un ingreso pasivo es un trabajo arduo que puede tomar años en desarrollarse hasta que comience a generar ganancias.
Algunos de los ejemplos más comunes de ingresos pasivos son los terrenos y casas puestos en alquiler. En ellos tu ya invertiste antes, al comprarlos o construirlos, y ahora puedes dedicarte a recolectar el dinero que le proveen sin tener que trabajar.
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De la misma manera puedes obtener ganancias con una página web, como por ejemplo un blog. ¿Cómo? Con publicidad. Google Adsense es una herramienta importante en este caso, puesto que generará anuncios específicos según el tipo de público de tu página y te pagará una cantidad considerable cada fin de mes, dependiendo de la cantidad de visitas que tenga tu blog. Incluso si no escribes más pero tu página sigue estando disponible, podría seguir recibiendo la paga si todavía existen personas interesadas en leerlo.
Recuerde que estas son opciones para incrementar tus finanzas, pero no deben ser tu única fuente de ingresos. Los ingresos pasivos no son una alternativa inmediata para dejar un trabajo; siempre será más rentable pensar en una empresa o un negocio. Pero, una vez logrado este, los ingresos pasivos se convertirán en una efectiva manera de generar aún más ingresos.
No olvides diversificar tu dinero en al menos dos o tres ingresos pasivos y busca siempre nuevos nichos de inversión.