Todos esperamos llegar a un trabajo en el que podamos sentirnos parte importante de una empresa, en el que sepamos que somos valorados y que nuestro trabajo es reconocido. Pero cuando este y otros factores comienzan a fallar, quizás ha llegado el momento de pensar en un nuevo trabajo.
Las razones para permanecer en un trabajo no son, hoy en día, las mismas que hace algunos años atrás. Mientras generaciones previas se sentían satisfechos con trabajos estables y pedían comodidades, los nuevos profesionales demandan desafíos y la oportunidad de optar por un crecimiento y seguir una línea de carrera.
Desde nuevas responsabilidades hasta un mejor sueldo, las oportunidades de crecimiento laboral son el verdadero incentivo de estos nuevos profesionales, por lo que al ver alejadas estas posibilidades, comienzan a preguntarse si no ha llegado ya el momento de pensar en un nuevo trabajo. Algunas de las señales que podrían estarte indicando este hecho son:
1. Llegas al trabajo desmotivado
Si has perdido la ilusión o ya no disfrutas tus labores diarias, entonces es seguro que algo está fallando. Quizás tus actividades han cambiado o tu trabajo ya no es un reto. Lo importante es descubrir si tu desinterés está directamente relacionado a tus responsabilidades o a factores externos.
2. Te preocupan tus finanzas
El salario es uno de los principales factores al momento de cambiar de trabajo, incluso si no queremos reconocerlo. Si sientes que no estás recibiendo un sueldo acorde con tu trabajo, o que este no ha aumentado durante demasiado tiempo, quizás es momento de pensar en un cambio.
3. No confías en tu empresa
Si has sido testigo de engaños a clientes, información confidencial sospechosa o sobornos a autoridades, es muy probable que pierdas la confianza en tu empresa y comiences a cuestionar tu rol en ella. Antes de verte involucrado en algún proceso judicial, piensa bien en el tipo de acciones que la empresa está tomando y decide si atenta contra tus principios.
4. No te sientes valorado
Cuando tu trabajo no es reconocido y, además de ello, no recibes un feedback adecuado para mejorarlo, entonces es claro que no estás siendo valorado dentro de dicha empresa. Otro caso importante es cuando sientes que las tareas que te encomiendan están por debajo de tu potencial. Sencillo: es hora de cambiar.
5. Tu vida ha cambiado
Hay ciertos trabajos que requieren de horarios o jornadas laborales incompatibles con la paternidad u otro tipo de situación familiar complicada. Pero si este no es el caso, y tu empresa simplemente no quiere entender ni ser flexible con tus necesidades, ha llegado el momento de dar un paso al costado y buscar otro espacio mucho más adecuado para ti.
Si te sientes identificado con algunos de estos 5 puntos o con todos ellos, es mejor que reflexiones sobre si tu ciclo en ese trabajo ha concluido.