Si estás decidido a emprender pero la economía no parece estar completamente de tu lado, aprovecha estas ideas para comenzar un pequeño negocio desde casa sin necesidad de invertir demasiado capital en ellas.
Organizar eventos
La organización de eventos es un negocio rentable y sostenible, puesto que más allá de las fechas especiales, siempre se siguen celebrando todo tipo de fiestas y reuniones: matrimonios, quinceañeros, aniversarios, reencuentros estudiantiles, presentaciones corporativas, etc.
No necesitarás invertir mucho capital para iniciar, pero tendrás que enfocarte en realizar los contactos adecuados con los proveedores de servicios, asegurándote de brindarle a tus clientes diversas opciones para su evento.
Clases particulares
Si tienes conocimientos especializados en determinadas materias, aprovéchalos para dictar clases particulares. Desde cursos de primaria hasta clases de apoyo para la preparación universitaria, puedes dictar las clases en tu casa, visitar el domicilio de tus clientes, brindar asesorías personalizadas o grupales, etc.
Pero no todo queda en el plano académico: también puedes dictar clases de música, manualidades, pintura, escultura, etc. Toda habilidad que pueda ser transmitida es una excelente oportunidad para iniciar tu negocio.
Intermediario comercial
Si tienes el don para comerciar con las personas, entonces puedes comenzar a desempeñarte como distribuidor o intermediario de un producto o sector. Deberás aprovechar tu red de contactos y buscar un producto que aún no cuenta con una buena red de distribución en determinado sector, ofreciéndolo a tu cartera de clientes a cambio del pago de una comisión por parte de la empresa productora.
Se trata de un negocio en el que no necesitarás realizar pagos por adelantado, adquirir la mercancía ni sufrir pensando qué sucederá si no terminas de vender todo tu inventario, limitando el riesgo de quedar sin retorno de capital.
Gestor de patrimonio
Una nueva opción es la posibilidad de dedicarte a gestionar el patrimonio de las demás. La idea es sencilla: existen muchas personas que cuentan con casas, departamentos, tiendas, etc. que desean alquilar, pero no quieren pasar su tiempo buscando inquilinos o mostrando los lugares. Por lo tanto, puedes ofrecerte a realizar dichas tareas a cambio de una cuota mensual.
Una excelente oportunidad se encuentra en la relación con los propietarios de casas de playa o de campo, puesto que necesitan constantemente arrendar dichos espacios y no pueden permitirse dedicar tanto tiempo a la búsqueda de nuevos inquilinos.